CRÓNICA DE LA XXVIII PEREGRINACION A LOURDES 2025
XXVIII peregrinación diocesana a Lourdes (28 al 31 de agosto)
Varios días de convivencia, fraternidad, oración y celebración con los enfermos, ancianos, hospitalarios, voluntarios, jóvenes y scouts se han desarrollado entorno a Ntra. Sra. de Lourdes en la peregrinación anual organizada por la Hospitalidad diocesana Ntra. Sra. de Lourdes de la diócesis de Barbastro-Monzón.
En esta peregrinación han acudido a Lourdes con nuestra Hospitalidad peregrinos de distintas edades desde Arén, Barbastro, Barcelona, Binaced, Binéfar, Campo, Candasnos, Castejón del Puente, Castinllonroy, Chalamera, Fraga, Huesca, Ivars de Noguera, Lérida, Mequinenza, Mollerusa, Monzón, Palma de Mallorca, Puente de Montañana, Pueyo de Santa Cruz, Salou, San Esteban de Litera, Sariñena, Tamarite de Litera, Torrente de Cinca, Zaidín y Zaragoza.

Esta peregrinación ha servido para conseguir, como Año Jubilar de la Esperanza, la gracia de la indulgencia plenaria en el santuario de Lourdes.
Una breve crónica de estos días de peregrinación podría resumirse de la siguiente manera.
El jueves 28 al mediodía partieron varios autocares desde distintas poblaciones con gran parte de los peregrinos y hospitalarios. Algunos llegaron con coches particulares días antes o ese mismo día. Los scouts, con Pedro Farré y Loreto Montañés (responsable diocesana de Scouts Católicos de Aragón-msc en la diócesis) en la coordinación, llegaron desde Binéfar como punto de partida hacia los autocares. Estos jóvenes llegaron desde los grupos scouts de Jaca, San Esteban de Litera, Binéfar, Fuentes de Ebro y de varios barrios de Zaragoza.

La llegada al santuario de Ntra. Sra. de Lourdes siempre es muy esperada desde el momento de pisar territorio francés. Los cantos y las oraciones surgen en todo momento en los autocares. Pronto veremos a lo lejos la torre más alta de la basílica de la Inmaculada Concepción que forma parte del santuario de Lourdes. A la llegada de los autocares nos han recibido algunos hospitalarios para ayudarnos con las maletas, pues llevaban varias horas en Lourdes. Los autocares tuvieron origen en Binaced con escalas en Barbastro y Arén, el segundo con origen en Binéfar, el tercero con origen en Fraga y escala en Monzón y el cuarto salió completo desde Fraga. A estos puntos se acercaron progresivamente la inmensa mayoría de los peregrinos, para llegar entorno a media tarde a Lourdes. Tras situarse los peregrinos en los hoteles próximos al santuario y en el Accueil del santuario y cenar a horario francés, se dio tiempo libre para pasear, ir de compras por las tiendas de recuerdos, encender una vela frente a la gruta de Massabielle, etc. en las inmediaciones del santuario.

El viernes 29 se inició la jornada a las ocho y media de la mañana con la Santa Misa de apertura de la de la XXVIII peregrinación diocesana a Lourdes en la iglesia de Santa Bernadette situada frente a la gruta del santuario. La Santa Misa ha congregado a todos los peregrinos, voluntarios, hospitalarios, jóvenes y scouts de esta peregrinación, presidida por el consiliario diocesano mn. Oscar Vives y acompañado por mn. José María Ferrer, anterior consiliario, por mn. Rafael Carrasquer y por el P. Antonio Alcántara cmf.

Posteriormente han marchado hacia la gruta de Massabielle en donde se desarrollaron las apariciones de la Virgen. Allí se puede tocar la cueva y también observar la fuente que brotó agua durante las apariciones. Buen lugar para rezar ante la Virgen por nuestros enfermos y ancianos.

La tarde del 29 de agosto ha tenido como punto de interés la charla sobre el mensaje del Jubileo y sobre el sentido y el motivo de una peregrinación, a cargo de mn. Oscar Vives, consiliario diocesano de la Hospitalidad, asistiendo unas cien personas. También esa misma tarde se realizaron visitas guiadas a la casa de Santa Bernadette Soubirous, situada muy cerca del santuario. Se trata de la casa natal (fue el Molino de Boly) pudiendo contemplar el dormitorio en donde nació Bernadette, la cocina y el antiguo molino.

A las 21 horas y en la explanada central del santuario, se ha celebrado la Procesión Mariana de Antorchas, una manifestación popular de devoción mariana de gran impacto en los asistentes a las peregrinaciones. Miles de velas encendidas han recorrido gran parte del santuario con el rezo del Santo Rosario. Varios jóvenes de nuestra Hospitalidad y scouts han portado la imagen de la Virgen y la han acompañado con antorchas por todo el recorrido. Al finalizar, representantes de nuestra peregrinación han cantado para los asistentes de muchos países la canción “S’ha feito de nuey”, compuesta en cheso hace cuarenta años por el oscense José Lera Alsina.







El sábado 30 amanece con la ilusión de celebrar a primera hora la Santa Misa en la gruta de Lourdes. Uno de los momentos más importantes de la peregrinación al santuario mariano de Lourdes es la celebración de la Santa Misa en la gruta de Massabielle, lugar emblemático y de fe del santuario y de la advocación mariana.
Los enfermos y ancianos acompañados por los voluntarios, hospitalarios, jóvenes, peregrinos y scouts han participado de la Eucaristía presidida por mn. José María Ferrer y otros sacerdotes diocesanos y de lengua española. La parte musical ha sido desarrollada como Misa Aragonesa por los integrantes del grupo de canto e instrumentos, habitual en nuestras peregrinaciones, dirigido por José Luis López Membrilla.


Demos gracias a Dios y a Ntra. Sra. de Lourdes por participar en la Santa Misa en la gruta, y por rezar en su santuario por los enfermos y los ancianos especialmente. Al finalizar la Eucaristía, todos los hospitalarios, voluntarios, enfermos, ancianos, jóvenes y scouts de nuestra peregrinación bajo el paraguas de la Hospitalidad diocesana, se han reunido en las escaleras situadas frente a la basílica de Ntra. Sra. del Rosario para hacer la tradicional foto de familia.
A continuación, se habían preparado dos actividades para desarrollar al mismo tiempo: el Via Crucis de peregrinos por la montaña próxima al santuario, y la convivencia con jóvenes y enfermos en la pradera situada frente a la gruta. Del Via Crucis cabe destacar la participación numerosa en todo el recorrido, a pesar de la dificultad del terrero por el que se transita. Este Via Crucis recorre la montaña con la contemplación de las catorce estaciones representadas con imágenes de gran tamaño. De la mano de mn. José María se han rezado las catorce estaciones, teniendo presentes a los enfermos y ancianos de nuestra diócesis, y también reflexionando sobre la mujer y los hijos en la actualidad.




La segunda propuesta era con los jóvenes y enfermos en la explanada frente a la gruta, que ha contado con la animación de los scouts Pedro y Loreto, mn. Oscar, la hna. Julia y un grupo numeroso de scouts y jóvenes acompañando al resto de enfermos y ancianos que no se han desplazado al Via Crucis. Organizaron canciones y actividades que facilitan la convivencia y el encuentro entre todos ellos. Varios de los scouts que han participado en esta peregrinación habían venido en años anteriores, siendo las edades desde los 15 años en adelante. La impresión que se llevan es muy positiva y ponen en valor la convivencia con los mayores y la relación directa con ellos, pues se hacen fotos, se intercambian los números de teléfono, etc.

Tras la comida se organiza la participación en la ceremonia del agua y los baños de enfermos. Se trata de sumergirse o lavarse con el agua de la fuente de la gruta que descubrió Santa Bernadette por indicación de la Virgen. Varios hospitalarios del santuario invitan a los enfermos y ancianos a orar mientras se participa de ese baño o lavado en unas cabinas habilitadas para ello. En esta ocasión alrededor de cincuenta personas participaron del baño o de la ceremonia del agua.
La jornada de sábado sigue con más momentos intensos. Por la tarde se desarrolla la Procesión Eucarística de enfermos desde el altar de la Pradera hasta la basílica subterránea de San Pío X. Esta procesión parte con el Santísimo Sacramento bajo palio acompañado por sacerdotes, religiosas, religiosos, fieles, enfermos y personal sanitario, mientras suena por la megafonía del santuario diversos himnos y salmos. Una vez en el interior de la basílica se procede a la adoración eucarística y posterior bendición de los enfermos con la Custodia. Según comentan desde el santuario mariano, es en el momento de la bendición de enfermos cuando se pude producir alguna posible sanación, de ahí la asistencia del personal médico, que en el caso de nuestra Hospitalidad acude este año con tres miembros.




Finalmente cerraron la jornada del sábado con el homenaje a enfermos y peregrinos. En este acto se hacen algunas actuaciones musicales y bailes de los jóvenes y scouts, se entregan los certificados de hospitalarios a los que han asistido cinco años a la peregrinación, las insignias scout de servicio en Lourdes, etc. Un momento distendido y con intervenciones del presidente, consiliario y otras personas.
La jornada del domingo 31 de agosto, último día en Lourdes, se abre con la Santa Misa internacional a las 9’30 de la mañana en la basílica de San Pío X. En esta basílica, que simboliza el casco de una barca invertida, se reúnen todos los fieles de distintos países que esos días han peregrinado a Lourdes. Estuvo presidida por el cardenal Baldassare Reina, vicario general de Roma y por mons. Mario Iceta, arzobispo de Burgos, entre otros obispos, sacerdotes y diáconos. En un lugar preferente de la basílica colocan a nuestros enfermos y ancianos en las famosas sillas azules de Lourdes. Esta Eucaristía supone un encuentro de fieles con carácter internacional y el envío a los destinos particulares de cada peregrino con la bendición y el amparo de Ntra. Sra. de Lourdes.



Este año la peregrinación ha tenido una distribución de horarios diferente a las últimas, pues se ha llegado el jueves por la tarde, a diferencia de otros años que se llegaba el viernes por la mañana. También ha sido diferente en el último día de peregrinación pues se ha comido en Lourdes a diferencia de otros años que se comía en el trayecto de regreso. Sobre las dos de la tarde se han cargado los autocares con los equipajes y otros elementos de la peregrinación, y los peregrinos han partido a sus lugares de origen.


Ntra. Sra. de Lourdes, ruega por nosotros. Santa Bernadette, ruega por nosotros.